lunes, 13 de febrero de 2012

Capítulo 1; segunda parte.

Cuando llegamos al departamento de mi padre, besé el suelo. No era nada seguro ir en el mismo coche que una niña de 5 años hiperactiva y un padre demasiado alegre. Me instalé en mi cuarto y ayudé a Hope a organizar sus cosas. Unas horas después, ya estábamos instaladas. Me quedé sentada en la cama que mi padre había escogido para mí hacia ya siete años. Era cómodo y mullida, perfecta. Miré la foto que había sobre la mesita de noche. Era una foto algo desgastada, con algunos que otros cortes. En ella aparecíamos Liam, mamá, papá y yo. Debía tener unos 5 años. Era hermosa, llena de recuerdos. Al lado de esta, había otra foto. Era Hope, con un par de coletas y una enorme sonrisa, como siempre. Era lo único que necesitaba tener allí. Sentí como la cama se vencía por el peso de otra persona, pero no miré, seguí observando la foto de mi princesa. La personita a mi lado me abrazó por la cintura y apoyó su cabeza en mi regazo. Bajé la vista y sonreí.

-¿Cuándo crees que Liam llegue?-Preguntó preocupada. Reí, era demasiado tierna.

-Dentro de poco princesa, dentro de poco-Dije más para mí que para ella. Pero ella se dio por enterada, se puso en pie y corrió fuera de mi habitación. Salí al oír un ruido proveniente de la puerta y me quedé observando, pero sin que nadie llegase a advertir mi presencia.

-Las fans están cada vez más descontroladas-Dijo una voz masculina, pero dulce. Desconocida para mí. Fruncí el entrecejo, ¿fans?

-Sí, pero son increíbles-Dijo otra voz masculina desconocida.

-Vale, increíbles, pero con tantas zanahorias al final voy acabar volviéndome naranja-Otra voz desconocida, masculina y divertida, muy divertida. Reí un poco, y pude oír otra risa, era adorable y dulce.

-Debiste decir que te gustaban las mujeres a las que les gustasen los Lamborginis-Esta vez la voz era algo más grave, pero suave y calmada, pero a su vez divertida.

-Ya es tarde. Nuestras fans son las mejores y punto-Esta vez sí que reconocí la voz, era Liam. Pero, espera un momento, ¿¡Fans!? ¿¡El mundo está loco!? ¿¡Dónde he estado los últimos meses!? Fruncí tanto el entrecejo que creía que mis cejas se iban a juntar en una sola en cualquier momento.

-¡Papi!-Esa era la voz de mi princesa-¡Papi, no encuentro mi disfraz de princesa!-Todo iba bien, hasta que Hope soltó un increíble grito y escuché sus pasos apresurados hasta que saltó y supuse que aterrizó en los brazos de mi hermano mayor.- ¡Liam! Te echaba de menos, en casa nadie quiere disfrazarse conmigo-Las voces desconocidas rieron, supongo que eso era algo que no se esperaban de Liam. Sonreí.

-Hope, eso era algo privado-Dijo avergonzado Liam-¿Estás sola? ¿_____ sigue enferma?-Preguntó preocupado. ¡Oh, que mono!

-No, está arriba, yo la llamo-Supuse que bajaría de los brazos de Liam y subiría a buscarme. Me equivocaba-¡______! ¡LIAM ESTÁ ABAJO PREGUNTANDO POR TI! ¡Y TIENE UNOS AMIGOS TAN GUAPOS QUE PODRÍAN SERVIR PARA HACER DE PRINCIPES!- Ahora era Liam el que reía. Y yo lo hice también. Supuse que los chicos estarían avergonzados. Cuando me calmé, me puse de pie de nuevo y me dirigía escaleras abajo. Miraba las escaleras, así que aún no había visto ni a mi hermano, ni a ninguno de sus amigos que podían servir para príncipes. Al primero que vi fue a mi hermano. Tenía el pelo ligeramente revuelto, pero brillante y suave. Sus ojos castaños relucían de felicidad, y su sonrisa se ensanchaba por momentos. Me abalancé, literalmente, sobre él, y nos fundimos en un tierno abrazo. Levanté la vista y besé una de sus mejillas.

-Te extrañé…-Dije en un susurro

-…Demasiado-Terminó él por mí

-¿Quieres ser mi príncipe?-Escuché como Hope le preguntaba a uno de los chicos, aún desconocidos para mí. Me separé de mi hermano y al fin los pude observar. El chico al que se lo había preguntado era algo más bajo que Liam. Tenía el pelo lleno de rulos de un color oscuro, como el de Hope. Sus ojos eran pequeños y de un color azul hipnotizante. Además de una bonita sonrisa de esas que tanto me gustaban a mí. Hope tenía razón, hubiera servido para príncipe, el príncipe británico.-Yo soy la princesa Hope, de los reinos rosados-Dijo inocentemente. Reí. Yo había inventado esos reinos.

-Yo soy Harry Styles, encantado princesita-El chico, ahora sabía, llamado Harry se agachó y besó la mejilla de Hope.

-Vale.-Hope sonrió y fue hacia los dos siguientes.- ¿Y vosotros queréis ser mis guardas reales?-Preguntó. El primero era un chico castaño, el pelo le tapaba la frente, pero dejaba ver sus ojos azules. Muy bonitos, por cierto. Sonreía divertido mientras le susurraba algo a Harry. Era de la misma altura que él. El otro era un chico algo más alto, con rasgos hindús, pero realmente apuesto. Tenía el pelo corto por los lados, y una especie de cresta por arriba. Tenía los ojos oscuros y sonreía de medio lado. Sexy.

-Bueno, será divertido-Dijo el castaño mientras le acariciaba la cabeza.-Me llamo Louis Tomlinson-El príncipe europeo, pensé.

-Y yo Zayn Malik-Terminó el moreno. El príncipe hindú.

-Bien, entonces tú serás el jefe de la guardia-Hope se dirigió al último de ellos. En cuanto lo vi, no pude evitar pensar que Hope estaba demasiado equivocada, ¿jefe de la guardia? Más bien era un príncipe, un rey. Era más bajo que los demás, pero aún así era más alto que yo. Tenía el pelo perfectamente despeinado en una cresta. Lo tenía de un rubio claro por la parte de arriba, y mucho más oscuro por los lados. Sus enormes ojos eran de un azul cristalino, en el que parecía que podías hundirte y nadar en ellos. Podía jurar que en el momento en que se había reído, la estancia se había iluminado una pizca más. Suspiré sin darme cuenta, y enseguida giré mi rostro, levemente encendido. Él no era un príncipe cualquiera, él era el príncipe de ensueño, perfecto, encantador, etc.

-Claro que sí pequeña, no podría negarle nada a la princesa de los reinos rosados-Sonrió. Morí. Besó tiernamente la mejilla de Hope. Re morí. Me miró. Subí al cielo.-Me presentó señorita, soy Niall Horan.

-Lo siento Liam, quedas relevado al puesto de caballo real-Dijo Hope disculpándose y se fue escaleras arriba.

-¿Cómo te las apañas para que todas acaben igual contigo, dejándote como un burro sin más?-Le pregunté divertida a Liam, picándolo. Él me miró con una ceja alzada.

-Chicos, ya que mi hermana no es lo suficiente educada como para presentarse solita, ya la presento yo. Ella es_____ Payne, mi hermana menor de 15 añitos, este año cumple 16, y uso pañal hasta los cinco años-Me miró con una pizca de picardía. Lo maté con la mirada. Ya me las pagaría.

-Hola-Dije tímidamente.

-Hola hermosa.-Esto lo dijo Zayn. Yo me sonrojé-Dime que no hace falta que nos volvamos a presentar-Dijo suplicante.

-No, ya lo he oído todo gracias a la princesita de la casa.-Dije divertida.

-Bien.-Dijo Louis mientras pasaba un brazo por mis hombros y me acercaba a él-Ahora cuéntanos algo del torpe de tu hermano-Al fin alguien coincidía conmigo. Reí.

-No, los trapos sucios me los guardo para más adelante-Lo miré con picardía.- ¿Dónde estabas para no ir a recoger a tus hermanas?-Le pregunté indignada.

-Bueno…. ¿se me olvidó?-Dijo con los hombros alzados. Lo maté con la mirada- Oye, es que ser famoso no es fácil-

-¿Tú? ¿Famoso? ¡No me hagas reír!-Dije divertida mientras reía. Todos me miraron serios.- ¿Qué?

-_____, no es broma. Somos famosos. Tu hermano, los chicos y yo hicimos los castings para Factor X, pero como por separado no nos cogieron, nos juntaron en un grupo. Quedamos terceros-Me dijo Harry. Yo los miré asombrada.

-Wow-Fue lo único que acerté a decir.

-¿Dónde has estado? ¡Es tu hermano por Dios!-Niall habló, y yo me quedé prendada de su voz.

-Supongo que en otro planeta-Bromeé.

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